Archive | May, 2012

Retos al viento

26 May

Hay personas perezosas en este mundo, gente floja, holgazanes y yo. Debo admitir que he ido 5 veces al gimnasio en mi vida, me gusta el deporte (por televisión) y no tengo un perro porque nunca correría detrás de él si se me escapa. Pero hay algo que simplemente me apasiona y es montar en bicicleta. Podría describir las rutas que he tomado y el tiempo que he pasado pedaleando y a cualquiera de mis compañeros deportistas diría “puro cuento, nadie se pega esa vuelta”; pero sí, la sudo, me quemo, me descuajo, de todo me pasa y al siguiente instante estoy pedaleando nuevamente. Qué puedo hacer si me gusta sentir el viento, el sol y ver el mundo pasar en cada pedaleo. Para mí montar en bicicleta no es cuestión de salir a hacer ejercicio, es cuestión de salir a vivir.

Holstee Manifesto written by Dave, Mike and Fabian
Music “Almost Everything” by Wakey!Wakey!
Director / Producer / Editor Cooper Miller
Cinematographer Anna Farrell
Producer Juliette Richey
Production Coordinator Whitney Matthews
Production Assistants Shawn Maguire & Wendi Miller
Book Cover Design Ray Shappell

Film direction, production and editing
demonstro.us

Music
Almost Everything by Wakey! Wakey!

Sabor a whiskey y ginebra

21 May

Uno de los enigmas para mi familia es qué hago en mi profesión. Estudié ingeniería química y a causa de ello me preguntan sobre cualquier cosa que tenga un “químico”, que según mi experiencia familiar lo defino como sustancia que no se sabe qué función tiene o que es difícil de pronunciar. Por favor dejen de preguntarme cosas de química como si las debería saber (bueno algunas si ¡pero no todas!). Para que entiendan lo que estudié he aquí un ejemplo de algo que podría hacer: destilar.

Brad Estabrooke es el fundador de Breuckelen Distilling Company, una pequeña destilería en Brooklyn, New York, que produce ginebra y whiskey.  En este video él comenta sobre su trabajo, sus inicios y por qué lo hace.

Este cortometraje hace parte de un proyecto llamado “Made by hand” que muestra personas que hacen cosas a mano a nivel local, de manera sostenible y con amor por su oficio.

director-producer KEEF
director of photography JOSHUA KRASZEWSKI
editor MATT SHAPIRO
title design MANDY BROWN
music ROMAN ZEITLIN
sound recordist ROBERT ALBRECHT
re-recording mixer NICHOLAS MONTGOMERY

thisismadebyhand.com
brkdistilling.com

Del mundo para la Tolva

21 May

 … entonces el Fantasma un poco aburrido de nosotros, sus únicos visitantes, nos preguntó “¿a qué se dedica el resto la gente afuera de la Tolva? ¿Cómo viven su día a día? ¿Qué los motiva a seguir?”

Preguntas difíciles para que las respondan tres simples parroquianos… pero a nuestra manera le responderemos al Fantasma. Le mostraremos en las próximas semanas mediante cortos la pasión del hombre por lo que hace, su día a día, sus ilusiones, sus miedos, las diferentes maneras en que percibe su entorno… en otras palabras como vive la vida.


Le hérisson – Dir. Mona Achache (2009)

17 May

Nuestra fanática número 2, Alethia, nos compartió su comentario sobre la película Le hérisson. Nos llamó mucho la atención así que le hicimos una propuesta indecente: le preguntamos si le gustaría escribir algo para El Fantasma. Ya que es una niña “buena” se negó.
Un día cualquiera apareció con esta reseña… Pero ¿quién las entiende? Cómo sea, siempre es bueno tener una mujer entre las filas de El Fantasma. Esperemos que nos sorprenda más a menudo con sus escritos.

Comentario de Le hérisson por Alethia:

Los acontecimientos de la última semana en mi vida me hicieron pensar en esta película. No tengo idea si llegó a los cines colombianos, y si lo hizo, no sé si fue bien o mal recibida. Conocí esta película prácticamente por azar, pero en momentos como estos me ha servido de ayuda. Le hérisson, basada en el libro L’élégance du hérisson de Muriel Barbery, cuenta la historia de cómo se entrecruzan tres vidas muy diferentes: Paloma Josse, una niña de once años apasionada por la cultura japonesa que ha decidido suicidarse, Réné Michel, una portera viuda aparentemente ignorante y Kakuro Ozu, un viudo japonés que es la persona que de alguna forma ayuda a cambiar la vida de ellas dos.

La historia se desarrolla en París en un edificio de gente “rica”, tal y como lo dice Paloma, acostumbrados a un determinado estilo de vida que ella está decidida a no vivir. Paloma hace parte de una familia en la cual lo más importante es el éxito profesional. Su diferencia con respecto del resto de la familia y del círculo social en el que vive se puede expresar con una de las líneas de esta película: “En el ajedrez, para ganar hay que matar; en go, para ganar hay que vivir, pero también  hay que dejar vivir a su adversario. La vida y la muerte no son sino la consecuencia de una construcción bien o mal realizada, y lo que importa es bien construir.”

Réné, la portera de este edificio, ha pasado desapercibida gran parte de su vida y ha resuelto refugiarse en lo que constituye su pasión: los libros. De puertas para afuera ella quiere mostrarle al mundo lo que éste espera de ella: una mujer ignorante y amargada. De puertas para dentro, es una mujer totalmente diferente, aficionada a León Tolstói y con ganas de vivir la vida. Las dos protagonistas tienen muchas cosas en común, y es por eso que eventualmente inician una amistad. De la misma forma ocurre con Kakuro. Los diferentes intereses de las dos, como el idioma japonés para Paloma y algunos escritores para Réné, concuerdan con los de Kakuro. Él está decido a demostrarles todo el tiempo que uno puede ser todo lo que uno quiere ser.

Estos tres protagonistas están rodeados por diferentes personajes. Por un lado, en el alto círculo social, está la familia de Paloma (el papá, la mamá, la hermana, el novio de la hermana y la familia de éste) y los demás habitantes del edificio, cada uno con una personalidad y modos diferentes de afrontar la vida. Por otro lado, en un círculo social diferente, está Manuela quien tiene una sincera amistad con Réné y Jean Pierre, del que Réné siempre ha estado preocupada. Kakuro, perteneciente al primer círculo social, es el único adulto al que no le importan las clases sociales ni lo que la gente puede pensar de él al entablar una relación con alguien de otro círculo social.

El amor y la forma en la que se vive la vida juegan parte importante de la historia. “Si se teme el mañana es porque no se sabe construir el presente, uno se dice a sí mismo que podrá hacerlo mañana y entonces ya está perdido porque el mañana siempre termina por convertirse en el hoy.” Sin embargo la muerte, uno de los temas principales, es la razón por la que he recordado esta película. De hecho, una de sus premisas es que “lo importante no es morir o a qué edad pase, sino lo que se está haciendo en ese preciso momento”. A través de toda la película se hacen diferentes menciones sobre este argumento y lo que significa la muerte, visto desde las tres perspectivas diferentes. Quizá estar vivo sea esto: perseguir instantes que mueren.

Al ver esta película, me sentí identificada con las dos mujeres protagonistas. Yo también he sentido esa especie de desesperación de terminar viviendo una existencia en una pecera, me he refugiado en los libros para evitar contacto con el mundo exterior, he disfrutado de un bocado (a veces, más de un bocado) de chocolatina, me gustan los gatos y disfruto del silencio. Comparto muchos de los pensamientos que se plasman en esta película. Especialmente, lo referente a la muerte. Al morir, ¿qué les gustaría estar haciendo? Morir estando dispuesta a amar de nuevo no parece para nada malo.

Espero que en el momento de su muerte, mi abuelito haya tenido un momento de lucidez y se haya sentido feliz por haber sido un buen padre y abuelo, por haber criado y sacado adelante a diez hijos y por haber visto crecer a doce nietos. Espero que haya sentido la satisfacción del trabajo bien hecho. Y espero que se haya sentido rodeado por el amor de todas las personas que lo acompañamos hasta el final.

Beetlejuice (1988) – Dir: Tim Burton

8 May


Hay muchas frases cinematográficas trascendentales que buscan explicar el sentido de la vida, las relaciones, la felicidad y esas cosas que la gente cree bonitas. Usualmente uno busca esta clase de frases o citas de grandes personajes para encontrar respuesta a lo que realmente no entendemos y nos desconcierta y sentir una luz en nuestro nubloso camino. No tuve que extender arduamente mi búsqueda para hallar la frase que me identifica: “Beetlejuice, Beetlejuice ¡Beetlejuice!”. Júzguenme como quieran pero ¡el poder de estas palabras es asombroso! Con esto uno no necesita meterse en un closet o ir a una plataforma mágica en una estación de tren para viajar a un mundo místico. De pequeño lo intenté, así como levanté los brazos para darle mi energía a Son Goku para la genkidama. Es que ¿quién no se entusiasmaría de traer al mundo de los vivos a este encantador personaje que parece la fusión entre La Máscara y los fantasmas del video Ghost de Michael Jackson (con traje, claro está)?


La historia trata sobre Adam (Alec Baldwin) y Barbara (Geena Davis) Maitland, una pareja de mediana edad que con esfuerzo y dedicación redecoran su nuevo hogar en un pequeño poblado de nueva Inglaterra. Poco tiempo después de culminar la redecoración, la feliz pareja sufre un fatal accidente en auto. Cuando se dan cuenta se encuentran de nuevo en casa pero algo es diferente: no se reflejan en los espejos y encuentran un libro llamado “Manual para recién fallecidos”. Salir de la casa no es una opción ya que un espeluznante y frenético desierto sin fin como pintado por Dalí yace afuera. Además una grotesca criatura en forma de gusano mora ese lugar en búsqueda de todo lo que se mueva. Después de estos hechos y leer en detalle el manual entienden que no sobrevivieron al accidente. Ahora en su existencia como fantasma deben esperar 125 años en su hogar para pasar a la siguiente fase (¿trascender?).

Los inconvenientes para la fantasmal pareja inician cuando la casa es vendida a una extravagante familia: los Deetzers. Esta familia se compone por Charles (Jeffrey Jones), el padre, un vendedor de bienes raíces, Lidia (Winona Ryder), la hija que es una amante de lo paranormal extraño e inusual, y Delia (Catherine O’Hara), la madrastra, una pedante escultora sin talento y con un poco usual estilo artístico, junto a su decorador de interiores Otho. Delia y Otho realizan una redecoración drástica en la casa. Los Maitland no pueden tolerar pasar su condena así, por lo que deciden asustar a los Deetzer para que dejen la casa. Sus técnicas terminan siendo poco efectivas, así que deciden buscar ayuda. Un “bio-exorcista” poco usual del Nomundo llamado Betelgeuse (Michael Keaton) aparece en la escena para resolver el problema.

Beetlejuice es una película de un humor negro único y así sea catalogada como familiar (o como yo las llamo “para niños grandes”) considero que tiene un trasfondo más fuerte. No se puede decir que tenga una historia del todo sólida pero el desarrollo de los personajes y el entorno lo suplen en cierta medida. Lo importante de este filme es la originalidad, el cómo presenta un nuevo concepto de la vida después de la muerte junto con un retorcido personaje fantasmal.

La interpretación de Michael Keaton me encanta y ha sido catalogada como una de las mejores de este actor. Este excéntrico, repugnante, frenético y caricaturesco personaje es todo lo que deseo ser cuando sea fantasma (con el respeto que el fantasma de la tolva se merece). El tema musical de la película es espléndido y junto a los efectos (rústicos pero brillantes) llevan al espectador en un delirante viaje al otro mundo.

Tengo que admitir que no soy muy adorador de las películas de Tim Burton pero que admiro el trabajo que realiza. En particular con este director sucede algo curioso;  he dejado de contar las personas (en particular mujeres) que dicen que les encantan las películas de él, pero cuando menciono Beetlejuice tan solo algunas pocas recuerdan la serie animada y se sorprenden al saber de la existencia de la película.

Una de las curiosidades que encontré en la web es la opinión de Burton sobre su filme: Es la única de todas mis películas que me ha dado esa sensación de “¡que se joda todo el mundo!” El público no necesitaba cierto tipo de cosas; yo podía hacer lo que me viniera en gana y eso era estupendo.

Otro hecho que me llama la atención son las presentes declaraciones de Burton sobre que no descarta dirigir la secuela de este filme. Más aún los rumores sobre Michael Keaton quién podría reencarnar el personaje. Espero que no se vaya a convertir en uno de esos títulos refritos como “Beetlejuice salva la navidad” o peor aún “Beetlejuice en París o en Australia” con las gemelas Olsen.

Creo que este post le encantará al fantasma ya que es un fanático de esta película. He visto su traje de jueves y es el mismo que el de Beetlejuice.

Pequeño homenaje a MCA

8 May

Con esta entrada quiero hacerle homenaje a Adam Yauch (MCA) que con su grupo Beastie Boys influenció en gran manera mi forma de ver el mundo. Sus canciones y videos no dejaron de sorprenderme hasta el final. Aquí el corto de 2011  dirigido y escrito por este artista intitulado Fight For Your Right Revisited que es la continuación cómica y retorcida, con Delorian incluído, del legendario video de Fight For Your Right que los Beastie Boys presentaron hace ya 25 años. Adam murió pero su legado como MCA durará por siempre.

Los juegos del hambre (2012) Dir. Gary Ross

1 May

Esta semana fui a ver la adaptación al cine de la novela que enloqueció a la juventud gringa por allá en  2009 y que está marcada a ser la sucesora de sagas exitosas como Harry Potter o Crepúsculo: Los juegos del hambre. Confieso, como buen colombiano promedio, que no leí el libro de Suzanne Collins y pocas ganas de hacerlo me quedan después de ver la película. Puede que se trate de una mala adaptación de una magnífica novela pero tengo serias dudas de que se trate de una obra que pueda equipararse con grandes clásicos del género como 1984 o Un mundo feliz.

 

La historia se enmarca en la nación futurista de Panem (nombre inspirado en la frase latina: panem et circenses), que está dividida en 12 distritos que sirven, además de dividir el territorio, para dividir la sociedad en una especie de castas según las ocupaciones de la gente. Así por ejemplo en uno de los distritos se genera toda la energía eléctrica y sus habitantes son obreros de la empresa de energía. La verdad es que durante la proyección sólo me quedó claro que los distritos 1 y 2 son, por así decirlo, la clase alta, que el distrito 11 congrega a la población negra y que en el distrito 12 la población, cuya tarea es la minería, a pesar de estar en el futuro viven como campesinos del Mississippi de principios del siglo XX (exceptuando que tienen televisión). Tal vez la descripción detallada de la sociedad no es necesaria si se tiene en cuenta que la narración se centra en el más llamativo de los eventos que organizan los dirigentes de Panem: Los Juegos del Hambre. Estos juegos anuales son un concurso televisado en el que participan 24 jóvenes llamados tributos, una pareja por cada distrito, que pueden participar por voluntad propia o ser escogidos al azar. Estos son abandonados en una locación remota, al mejor estilo de Expedición Róbinson, en la que además de sobrevivir a las inclemencias de la naturaleza (y a las de los productores del programa) deben batirse en un duelo a muerte y sin reglas del cual tan solo uno puede salir ganador. La película cuenta, entonces, la participación de Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence) en los 74avos Juegos del Hambre. Ella es una valiente joven del distrito 12 que se ofrece como voluntaria para reemplazar a su hermanita que segundos antes había sido escogida al azar por los organizadores. Gracias a su temple, habilidades y belleza, Katniss se convierte en la preferida del público y de los patrocinadores lo que le ayuda muchísimo para avanzar en el concurso, sin embargo en un juego a muerte todo puede suceder.

 

No niego que el argumento de una sociedad entretenida y sometida por un juego que combina las antiguas luchas de gladiadores con los concursos televisivos de nuestros días es más que interesante pero eso no es suficiente para hacer una buena película. Para empezar a dar mi opinión debo confesar que la mayor motivación para ir al cine y ver Los juegos del hambre fue ver a Jennifer Lawrence a quien tengo más que fichada desde el año pasado por sus apariciones en X-Men y Lazos de sangre. Los que conocen el nominado al Oscar trabajo de Lawrence en esta última película verán inmediatamente a Ree Dolly en Katniss. La protagonista de Lazos de sangre y la de Los juegos del hambre se parecen no sólo en lo decididas e intrépidas sino que además comparten un entorno decadente de pobreza en el que ellas a su corta edad tienen que velar por sus hermanitos y por sus madres que quedaron un poco locas ante la ausencia de sus resspectivos esposos. La diferencia es que la historia de Ree sucede en la fría EEUU de hoy mientras que la de Katniss en una sombría sociedad futura. Debo decir que ese papel no le queda mal a Lawrence y con su mirada fija y seria es una hermosa heroína. Sin embargo, el entorno fantasioso y minuciosamente cuidado contra la censura le quita un poco de fuerza al personaje que no me causó la misma impresión que el de hace dos años.

 

Digo lo del cuidado con la censura porque es esa sensación de una trama reprimida la que caracteriza a Los juegos del hambre de Gary Ross. Si uno se pone a pensar, el argumento es lo bastante macabro y sangriento como para no catalogar la obra para menores de 12 años acompañados por un adulto. Para lograrlo tuvieron que suprimir gran parte de las tensiones que puede generar esta trama tan interesante en el papel. Por eso es que vemos a Katniss acechar a los otros tributos con su arco y tan solo usarlo al final para eliminar al “abusetas” sádico, en una escena en la que ni siquiera vemos al malo caer hacia la muerte sino la cara de tranquilidad de los buenos. Por momentos, aunque el espectador sepa que se trata de una lucha a muerte, la película parece la búsqueda del tesoro de Los Goonies y no se llega a sentir el nivel de tensión que se debe generar en el personaje adolescente al ver que uno a uno van cayendo sus compañeros. Pero lo macabro no puede dejar de ser macabro y una de las escenas más emotivas es ver a Katniss salvada por un joven que mata brutalmente a una niñita evidentemente menor que él. Aunque no se quiera aceptar y casi toda la violencia sea implícita, el simple hecho de tener a jovencitos matándose salvajemente es bastante como para reflexionar sobre la conveniencia de su catalogación para menores. Para mí esto no es más que una evidente hipocresía por parte de los productores que terminan vendiendo un producto sumamente violento como una historia para disfrutar en familia y lo peor es que se salieron con la suya, con una película muy floja pero sumamente taquillera.

 

Para terminar con esta crítica debo decir que en cuanto a efectos y vestuario no hay nada que destacar. Resulta bastante ridículo que la aristocracia de Panem se componga por personajes mal copiados de Alicia en el país de las maravillas y que para hacer ver a Lenny Kravitz futurista lo único que se les ocurrió fue ponerle pintura dorada en los párpados. No creo que en la noche de Halloween me vaya a encontrar con una sola persona disfrazada con motivo de esta película que no ofrece nada innovador.

 

Sinceramente no parece posible que esta nueva saga de Hollywood vaya a perdurar en el tiempo pues ninguno de sus elementos la encamina a convertirse en un clásico. El argumento es interesante pero su desarrollo no. El gran y tal vez único acierto de Ross fue contratar a Lawrence que es la que hace realmente soportable esta larga película. Esperemos que esta hermosa actriz no se queme y nos vuelva a sorprender como en Lazos de sangre, por lo pronto ya no seguiré dándole más palo a Los juegos del hambre ya que esta entrada se me está alargando mucho.

Ojalá que esta entrada dé para discutir y espero sus comentarios por acá o en mi cuenta de twitter: @peresoj